Soplador

En el ámbito de la limpieza y jardinería, es común el uso de una herramienta llamada "soplador", que expulsa aire a gran velocidad para mover hojas, hierbas, polvo y otros residuos. Sin duda, es una herramienta muy útil para quienes realizan estas tareas. Esta semana, sin embargo, fui testigo de algo inusual: conocí al primer "soplador humano". Se trataba de un hombre que barría una vereda con una simple escoba. Algunas hojas y desechos se habían quedado atrapados entre unas rejas, así que, sin más, el hombre se inclinó y, usando solo la fuerza de sus pulmones, sopló con determinación hasta lograr que las hojas siguieran su camino, permitiéndole barrerlas con facilidad.

Una escena simple, que en otro momento de mi vida habría pasado desapercibida, capturó mi atención y me llevó a reflexionar sobre muchas situaciones. Recordé las enseñanzas del clásico libro El líder que no tenía cargo de Robin Sharma, especialmente una de mis frases favoritas: "El liderazgo tiene que ver con la excelencia de tu trabajo y de tu comportamiento. Se trata de realizar magníficamente tu labor en el puesto en el que te encuentres. Se trata de inspirar a cada una de las personas con las que trabajas y a las que atiendes. No se necesita tener un cargo para ser un líder."

Cuando abordamos nuestras tareas con la mejor actitud, nuestro bienestar emocional y físico se ve grandemente favorecido. Además, una buena disposición no solo mejora nuestra calidad de vida, sino que también abre puertas a nuevas oportunidades. Cada tarea que realizamos en cualquier ámbito de nuestra vida, no solo en una organización empresarial, está estrechamente conectada con otras. Para lograr una eficiencia plena, es crucial la dedicación de cada uno de los integrantes. Una labor que pueda parecer simple tiene un valor intrínseco y actúa como una pieza fundamental para alcanzar los objetivos comunes.

No es necesario alcanzar un rango elevado para ser líderes, ya que el verdadero liderazgo comienza formándose desde dentro. El liderazgo y las ganas de salir adelante residen en cada persona, no en su entorno. Este liderazgo interno se manifiesta cuando enfrentamos nuestras responsabilidades con pasión y compromiso, influenciando positivamente tanto nuestro entorno como a quienes nos rodean.

Tu labor como emprendedor es muy importante.

Tu labor como dependiente es muy importante.

Tu labor como madre que se queda en casa es muy importante.

Tu labor como madre que trabaja fuera de casa es muy importante.

Tu labor como esposa o pareja es muy importante.

Lo único que necesitas es creer en ello y poner pasión en todo lo que haces.

Con amor.

Silke